Tesoros encontrados

Desde niños soñamos con encontrar un tesoro. Yo encontré mi Cueva de Alí Babá en mercados de segunda mano. Objetos que otros desechan pueden resultarnos piezas maravillosas para nuestro hogar. La combinación de sillas de distintos modelos y acabados me parece una idea genial para un porche o una terraza estilo vintage. Estas tres sillas son Tesoros Encontrados. 

Material necesario: 

Balleta

Lija fina y gruesa

Pintura acrílica blanca

Betún de judea

Grapadora profesional

Retal de tela

Cuerda fina color natural

Brochas distintos tamaños

Espuma de tapizar

Tijeras

Cola de contacto

Todo este material es fácil de encontrar en cualquier ferretería o centro de bricolaje. Los retales de telas pueden ser los que nos hayan sobrado de tapizados antiguos. 

Esta silla que vemos a la derecha estaba en perfecto estado, sólo hubo que retapizarla y lijarla para quitar el barnizado que estaba resquebrajado.

Paso 1. Limpiamos la silla y la lijamos primero con la lija gruesa. Después pasamos la lija fina hasta que eliminemos todo el barniz.

Paso 2. Eliminamos el tapizado antiguo y recortamos la espuma de manera que nos encaje entre las cuatro patas. Con la silla dada la vuelta grapamos la tela con una grapa en cada lado de la silla, asegurándonos de que queda bien estirada y sin arrugas. Vamos completando cada lado con una tira discontinua de grapas. 

Paso 3. Las esquinas son las más complicadas. Tenemos que cortar la tela en diagonal al ángulo recto que hace cada esquina. Doblamos hacia dentro la tela sobrante y grapamos en la parte inferior.

Paso 4. Una vez terminado podemos tapar la parte de abajo con la misma tela u otra distinta de manera que quede oculto el entramado de la silla.

La terminación de esta silla que aparece en la imagen de la izquierda es de lo más isleña. Era de color madera y estaba muy deteriorada. En estos casos lo más fácil es darles una capa de pintura y envejecerla. 

Paso 1. Limpiar la silla y pintarla de blanco. Si la capa de pintura es irregular le dará un aspecto de envejecido natural.

Paso 2. En un trapo viejo untamos un poco de betún de judea y lo frotamos por toda la silla. 

Paso 3. En este caso, como el respaldo estaba roto, le puse las terminaciones en cuerda pegándolas con cola de contacto.

Paso 4. Puedes añadir otros detalles de cuerda como he hecho yo en el reposapiés inferior.

Cada silla es un mundo, así que si encontráis vuestro tesoro no dudéis en personalizarlo y crear un objeto único para tu hogar.

La Familia Coneja

Las habitaciones infantiles nos permiten dar rienda suelta a nuestra imaginación y crear así un espacio acogedor y divertido para los nuevos miembros de la familia. Os propongo crear un detalle decorativo y personalizado para lograrlo. Yo he elegido una Familia Coneja, pero este trabajo se puede adaptar a muchos otros elementos como coches, flores, globos...¡las posibilidades son infinitas!

Mamá Coneja sale de paseo con sus conejitos. Se ha puesto un  hermoso lazo y a sus pequeños también. Uno de ellos se ha soltado la lazada escribiéndose con ella el nombre de Jaime.

Material que necesitamos:

• Cartón: podemos utilizar cualquiera, pero cuanto más consistente sea mejor.
• Papeles decorativos: dos o tres tipos diferentes de la gama de colores de la habitación.
• Lazo: que combine con los papeles escogidos. Yo he elegido uno de cuadrito vichy marrón.
• Cuerda: estrecha y de color natural.
• Cola de contacto y pegamento de barra.
• Tijeras y cutter.
• Cinta de doble cara.

Detalle de nombre

Paso 1. Dibujamos cada uno de los componentes de la Familia Coneja o buscamos plantillas en la web. Las calcamos en el cartón y en los papeles que hayamos escogido.

Paso 2. Recortamos el cartón con el cutter y así tendremos las plantillas. Después recortamos el papel con las tijeras y lo pegamos sobre el cartón con el pegamento de barra.

Paso 3. A la Mamá Coneja le atamos al cuello una lazada de cuadrito vichy, y a los dos primeros conejitos lazos de cuerda.

Paso 4. Sobre una superficie de cartón escribimos el nombre con la cuerda mientras los vamos fijando con la cola de contacto. Cuando esté seco recortaremos con cutter el cartón justo alrededor de toda la cuerda. Es importante acordarnos de dejar un trozo de cuerda libre antes de comenzar el nombre.

Paso 5. Por la parte trasera de cada una de las piezas pegamos pequeños trozos de cinta de doble cara. Una a una las vamos colocando en la pared a la altura y distancia que nos convenga.

Paso 6. El extremo izquierdo de cuerda que hemos dejado antes del nombre lo pegamos, con cola de contacto, en las patitas delanteras del último conejo. El trozo de cuerda que queda hasta el nombre lo pegamos con pequeños trozos de  la cinta de doble cara.

Este es el resultado, una encantadora Familia Coneja en nuestra habitación.

Os propongo otras dos ideas para llevar a cabo con la misma técnica.

 

Espero que os guste y que disfrutéis en familia de esta manualidad.